Cómo entrarle a Calabozos y Dragones

Es indudable que de algunos pocos años a la fecha, los juegos de rol han tenido más popularidad de lo que alguna vez gozaron. La quinta edición de Calabozos y Dragones (a partir de aquí, D&D, por sus siglas en inglés Dungeons & Dragons) ha logrado que se sumaran más y mas personas al pasatiempo, y desde celebridades jugando, canales de Twitch, series, referencias, etc. ha llegado el turno de que tú, sí tú, estés aquí ahora.

Ya sea porque viste Stranger Things, The Legend of Vox Machina, o lo que sea, pero tienes una curiosidad y quieres probar a jugar D&D con tus amigos y amigas, o familiares. Quizá buscas impresionar a esa chica o chico para que vea que Nerd es el nuevo sexy. Sea cual sea tu caso, esta serie de artículos te ayudarán a aventurarte en este mundo de fantasía, papel y lápices en el que, si te gusta, vas a pasar horas muy divertidas.

Lo que nadie te dice

Empecemos por la dura realidad, porque es mejor que lo sepas de antemano y tengas una idea en qué te estás metiendo y te prepares, no queremos que a medio camino tires la toalla porque “nadie te dijo de que se trataba”, es mejor que desde ahora hagas una seria evaluación de tu vida y te respondas la pregunta ¿D&D es para mi?, porque esto no es un juego, bueno sí, sí es un juego, pero sabes a lo que me refiero.

Tomándolo con toda la seriedad que se requiere, porque hasta para jugar a las escondidillas hay reglas y requerimientos, en D&D pasa lo mismo.

Necesitas:

  • Leer (y mucho)
  • Amigos (con 2 o 3 funciona)
  • Tiempo (al menos unas 3 o 4 horas)
  • TIEMPO (esas horas al menos una vez al mes)
  • Inversión (ademas de dedicarle tiempo, vas a gastar, poco o mucho, pero vas a gastar)

Es todo, fácil ¿no?, leer, amigos, tiempo, inversión y ah, se me olvidaba, vas a necesitar también algo de tiempo. En serio, tiempo. “Pero Máster, ¿por qué mencionas tiempo tantas veces?“, ah, qué bueno que lo preguntan, la verdad lo menciono para distraerlos un poco de la tarea número uno que es… (redoble de suspenso)

¡¡LEER!!
y el tiempo que requiere

Así es, todo fue una elaborada treta para decirte que vas a tener que leer y eso requiere tiempo y con eso tenemos que también necesitas de… (redoble de suspenso)

¡¡TIEMPO!!
del que vas a usar mucho en leer

No, pero ya en serio, D&D requiere de tiempo y de leer, y no sólo lo digo yo, lo dice la ciencia:

¡La Ciencia de D&D!

Esta es una parada obligada, permítanme vestir mi bata de laboratorio y mis gafas de seguridad (Nunca olviden sus gafas de seguridad, la seguridad es primero) y acompáñenme en esta breve pero ilustrativa explicación sobre D&D, <se coloca la bata y las gafas de seguridad>.

D&D, como muchos otros juegos de rol, tienen una serie de reglas y composiciones que permiten que se de el juego de rol.

Un grupo de personas, por lo regular de 3 a 7, se reúnen al rededor de una mesa a jugar D&D, de estas personas una será el narrador o, conocido en la jerga de D&D como Dungeon Master o máster o DM para acortar. (Dado que es el término en inglés, las mujeres Dungeon Master, serian Dungeon Master o DM, obvio).

Y entonces van a comenzar a crear colaborativamente una historia que. ¿Saben qué? mejor vean este video que lo explica bastante bien, después de todo, van a tener que leer mas cosas de todos modos, y la verdad es que el video lo explica perfecto, ¡Corre video!

Mucho mejor ¿no creen?, si se saltaron el video están haciendo trampa porque como les dije, necesitan tiempo, y eso incluye ver el video, y sin no tienen 7 minutos, cómo esperan tener sesiones de juego de HORAS.

Entonces, sí muy bonito y educativo el video y todo, “pero Máster, aún no sé qué necesito para jugar“. Está bien, si has llegado hasta aquí es porque verdaderamente quieres jugar D&D o eres una persona con mucho tiempo libre (y qué mejor que lo ocupes en D&D).

Requisitos indispensables

Cómo ya viste, las mesas de D&D tienen los dos elementos bien marcados, las personas que juegan con su personaje y la persona que juega siendo DM.

Y es aquí donde la primera distinción se hace presente, siempre quien es DM es la persona que más tiene que invertirse en el juego. Por lo regular son DMs los que invitan a otros incautos a las mesas de juego, y al proporcionarles una experiencia sencilla y divertida, van reclutando a las filas a más y mas personas. Sí, ya sé que suena a una especie de culto, pero no es diferente de que te inviten a jugar un partidito de fútbol y terminas en un equipo, o de que te invitan a ver unos refractarios y terminas ofreciendo tus catálogos en la oficina. Es algo así pero créeme, mucho muy divertido.

Entonces, si quieres jugar pero no quieres ser DM, piérdete, no nos gusta tu tipo de gente por aquí. Eso te diría si fuera un xenófobo cerrado, pero la verdad es que como dije, necesitamos amigos para jugar, así que sigue leyendo y si esto no es para ti, quizá podrías encaminar a alguien a que se convierta en tu DM, o en una de esas, terminas animándote a ser uno tú mismo.

El puesto de DM siempre es el que tiene más por hacer pero es igual satisfactorio. Entonces, ¿qué tienes que leer? pues las reglas del juego, mismas que están contenidas en un bonito libro llamado Manual de Jugador (Player’s Handbook) que tienes que adquirir (¿recuerdas que dije invertir?) para poder jugar.

Pero oh aquí viene la parte buena, no necesitas comprarlo para ver si te gusta, la compañía que hace el juego sabe que para hacerte gastar, primero debe darte a probar de sus dulces mieles, por lo que debes comenzar leyendo las Reglas Básicas, un resumen de lo más esencial que necesitas para comenzar a jugar. El material original en inglés lo puedes encontrar en DnDBeyond, la página oficial donde puedes adquirir tus libros digitales y opción de usar herramientas digitales. (https://www.dndbeyond.com/sources/basic-rules) Vas a necesitar crearte una cuenta, pero ahí está todo organizado y con ilustraciones. Es español, hay varias traducciones de la misma información en muchos lados, de momento puedes usar la info en Nivel20 (https://nivel20.com/games/dnd-5/rulebooks/4-reglas-basicas) o en https://sites.google.com/site/5esrdes/home?authuser=0

Entonces ve a leer, y regresa porque vas a leer y luego vas a quedarte quizá con la incógnita de, no entiendo nada y es aquí donde si no tienes la suerte de tener una persona te explique y te lleve de la mano, te alegras porque yo estoy aquí para eso.

Así pues, supongamos que lograste juntar a un grupo de personas en probar la experiencia de D&D y es tu labor hacer de DM, ya tienes una idea de construir historias de manera colaborativa, pero entonces ¿qué con la reglas y eso?

D&D en su 5ta edición utiliza un sistema basado en dados de 20 caras o d20 para abreviar, esto significa que cada vez que necesiten determinar el resultado de algo, desde saber si puedes hacerle daño al enemigo hasta saber si puedes aguantar el peso de la puerta durante unos minutos para que pasen tus compañeros, necesitarás lanzar un dado de 20 caras y hacer algunas sumas, y el resultado determinará si logras hacerlo o no, o que tan bien o mal lo haces.

Para esto D&D utiliza una tabla de dificultad

DificultadDC (CD en español)
Muy fácil5
Fácil10
Media15
Difícil20
Muy Difícil25
Casi imposible30

Las Dificultades o Clases de Dificultad, DC para abreviar, aplican a todo menos al combate, esto se maneja un poquito diferente pero llegaremos a ello en su momento.

Como mencionaba, vas a lanzar un d20 y sumarás (o restarás)  al resultado algunos valores y el total determinará si lo lograste o no, en función de la dificultad de la tarea y la diferencia del resultado en tus dados. Más allá del criterio del DM no hay una guía para adjudicar qué tan difícil es hacer algo, pero por regla de uso general suele ser 15, una dificultad media, y de ahí conforme vas aprendiendo el juego y el sistema podrás ajustar las dificultades en función del momento en que se requiera la tirada. Habrá casos donde no se necesite lanzar dados y otros donde la tarea sea de una dificultad elevada y el camino de la historia depende de una tirada de dados.

¿Pero máster, qué carajos voy a sumar o restar?”, es aquí donde entramos en el siguiente punto del sistema, para que el sistema d20 funcione, además de tirar y sumar, necesitaras, exacto, lo adivinaron bien, números que sumar, y estos los obtendrás derivados de la otra parte importante del sistema, las características.

En inglés se conocen como Ability Scores, y se entiende bien porque junto con los Skills, diferencias uno del otro, mientras que en español usamos Características para los Ability Scores, y Habilidades para los Skills.

Como verás en las reglas básicas existen 6 características que componen a tu personaje, Fuerza, Destreza, Constitución, Inteligencia, Sabiduría y Carisma. Y estás se miden con un número que por lo regular va desde 8 hasta el 20 (hablaremos a detalle sobre esto en el apartado de creación de personaje) de momento sólo necesitas saber que el número en tu característica te dará un número como modificador de característica mismo que, como todas las cosas en D&D, vienen en una tabla.

Puntaje de Característica (Ability Score)Modificador
1-5
2-3-4
4-5-3
6-7-2
8-9-1
10-11+0
12-13+1
14-15+2
16-17+3
18-19+4
20-21+5
22-23+6
24-25+7
26-27+8
28-29+9
30+10

Así pues si tienes un puntaje de característica de Fuerza de 16, tendrás un modificador de +3 en todo lo relacionado a fuerza, y es aquí donde entran los Skills o Habilidades (y las salvaciones y ataques, pero vamos por partes).

En D&D existe una pequeña lista de Habilidades de uso más común en las aventuras del juego, misma que está contenida en la reglas y aunque sé que aman las listas y tablas tanto como yo (porque han seguido leyendo hasta acá empeñados a jugar D&D, tan lleno de listas y tablas) no la voy a colocar porque recuerden, estamos tratando de darle forma a todo eso que ya está contenido en las dichas reglas.

Así pues como veremos en la creación del personaje, las Características te proporcionan modificadores que aplicarás en tus habilidades y demás apartados, para que, cuando necesites determinar el resultado de algo, lanzarás tu dado, agregarás modificadores al resultado y compararás contra la dificultad que te indiquen.

Eso en esencia el sistema en el que se basa D&D, sumas y restas con dados, así de simple pero mucho muy mágico.

El combate es una cuestión similar, lanzas dados, tomas modificadores y tienes una dificultad, sólo que para el combate la dificultad no la determina una tabla, sino una serie de sumas de cosas, y no se le llama DC o clase de dificultad, sino se le llama Clase de Armadura o Armor Class, CA o AC, para abreviar.

Las cosas que entran en juego para todas esas sumas, son las características, raza, clase y nivel del personaje, pero entraremos en detalle en eso en otro artículo.

Ya sabemos comó funciona la parte mecánica del juego, la médula de las reglas y tablas y números, pero D&D no sólo es eso, siempre he considerado que los tres pilares del juego son Combate, Exploración y Role Playing o interpretación. 

La otra cara de la moneda

Los otros dos aspectos del juego son por lo regular más difíciles de poner en los libros y las reglas, pero son a su vez los más sencillos de abordar puesto que no requieren de tablas y numeros, sólo poquito, pero se basan en la imaginación y la narración.

DM es sinónimo de juez y guía porque es quien se encarga de asegurarse que todas las personas que jugarán tengan su personaje y que vayan entendiendo las reglas, guía porque un DM mostrará las razas, clases del juego para tratar de llevar la idea del personaje que tengan quienes vayan a jugar a un hoja de papel apegada a las reglas necesarias del juego.

Sin embargo su labor también es de mediar y proporcionar la narrativa de la historia, proveer de personajes que se encontrarán con el grupo de juego, su labor es describir un lugar, un momento, una escena, crear dilemas, crear drama, tensión, momentos heroicos, en fin, como suele decirse en los videos y demás libros, es una especie de directora o director de cine, en cierta medida esto es cierto pues su tarea es de asegurar que la historia avance, pero no funge del todo con la dirección porque a diferencia de las películas, en el juego de rol no hay un guion, el o la DM no sabe del todo cómo van a reaccionar los personajes, qué van a decir o hacer, y mucho menos sabe si al lanzar los dados saldrá 1 o 20. Y en esos momentos de incertidumbre, la figura de DM pasa de la dirección a la improvisación, adaptando los resultados de las acciones de los personajes de tal manera que la narración se siga construyendo y todos pasen un rato entretenido.

Ser DM conlleva dedicarle tiempo a crear historias pero no historias en el sentido literal de la palabra, sino más bien a crear hitos que se irán conectando en las sesiones de juego.

Master, ¿dijiste sesiones en plural?” en efecto, con las lecturas, la creación de hitos y todo lo demás vas a necesitar dedicarle varias sesiones de juego si quieres avanzar una buena historia, no es un requisito, como veremos en futuras entregas, hay historias cortas para que puedan jugarse y una vez y que no dependan de varias sesiones, incluso construiremos una. Pero la realidad es que cuando quienes juegan le encuentran el gusto querrán seguir jugando más de una vez.

Esta parte que no es mecánica de juego, sino creación narrativa, lleva al DM a idear lugares, desde pueblitos hasta intrincados calabozos, idear personajes, desde un amigable aldeano hasta una villana despiadada pero admirable, crear complejos sistemas de acertijos para abrir puertas hasta trampas con limites de tiempo para desarmarse. Inventará pueblos, ciudades, dibujará mapas de áreas pequeñas, grandes, ideará dedidades conflictos políticos, mientras más vayas disfrutando hacer todo eso, verás que parte de la diversión de ser DM es toda la preparación previa a la sesión de juego, y mientras quienes juegan van a disfrutar la sesión como personajes, un DM obtendrá también diversión en ver la reacción del grupo de juego, ver como se parten la cabeza con algún acertijo, las miradas de asombro cuando se develan los giros en la historia, es una satisfacción diferente a la de ser jugador y muchas veces esa carga de labor de DM se vuelve tan sencilla por el mero gusto de ver la reacción del grupo de juego.

Suena hasta romántico, pero hay algo de eso, si vas a adentrarte como DM tienes mucho que hacer, necesitarás conocer las reglas del juego, pero también crear mucho, tomar notas, crear apuntes, etc.

No trato de asustar pero como dije al inicio, sábete bien a qué te vas a meter.

¡Cállate y toma mi tiempo!

Llegaste pues hasta aquí, leyendo, un aplauso porque es solo la punta del Iceberg, ¿ahora qué sigue? pues… ir entrando de lleno a cada una de las cosas que conforman el juego de D&D.

No necesitarás gastar dinero por ahora (pero créeme terminarás haciéndolo). Con las reglas básicas podrás tener sesiones de juego y eso determinará si quieres adentrarte y comenzar a adquirir tus libros (en formato digital o físico), y serás tú quien decida cómo llevar tu experiencia de juego, quizá quieras dados, o playmats para dibujar, o querrás miniaturas, o querrás migrar a formato digital, o querrás comprar aventuras ya hechas y correrlas, o adquirir ayudas de juego, en fin, allá afuera hay un mundo de opciones para que juegues D&D de la manera que mejor te guste.

Mi labor será la de un DM, irte llevando de la mano para que tengas una referencia más amigable que sirva de soporte en tu aventura. Algo que te ayude a entender esas partes que no quedan del todo claras en los libros.

No lo olviden, se vienen cositas:

  • Conociendo la Hoja de Personaje
  • Creación de personajes
  • Mi primera aventura
  • Róbalo todo o cómo crear aventuras
  • La sesión cero